Buceando el cielo
Garitos sin hora de entrada ni salida. Garitos de barra libre. Me conocen por ahí, en los suburbios o en las zonas de alta alcurnia, como El Instructor, como aquel excéntrico monstruo de Tasmania que regenta un antro sin paredes, puertas ni ventanas. Mi morada, pues mía es aún sin tener la escritura de la […]